¿Tan difícil es llorar?

Permitámonos expresar el dolor emocional; así como nos permitimos expresar el dolor físico; que sabemos puede pasar; mientras que el dolor del alma no.

6 MAY 2024 · Lectura: min.
¿Tan difícil es llorar?

Permitámonos expresar el dolor emocional; así como nos permitimos expresar el dolor físico; que sabemos puede pasar; mientras que el dolor del alma no.

¿Tan difícil es llorar?

Que ironías las de la vida, cuando es tanto el dolor que sentimos y son muchas las personas que no nos dejan expresarlo, por el simple hecho de no tener pruebas físicas para justificarlo o por razones no divulgadas de estas que no se sienten capaces de quitarlo; sin tener el conocimiento de que el dolor del alma dura toda la vida y lo que debe de hacerse es aprender a vivir con él, hasta que vaya disminuyendo muy lentamente.

Nos encontramos con una mentira aceptada socialmente que hace referencia a la poca cultura que tiene la gente al expresar el dolor ante la pérdida de un ser querido; pero la realidad nos demuestra lo contrario. Al trabajar con deudos (personas que han perdido seres queridos) nos damos cuenta que el error es de quienes no se ven enfrentados ante la muerte de alguien importante para sus vidas y a su vez están llenos de mitos que sin querer contribuyen a que estos deudos repriman un dolor tan grande e indescriptible, que no tiene cura, un dolor que hace que estas personas se sientan al borde de la locura.

¿Por qué es importante llorar?

¿Por qué no nos permitimos llorar ante algo, que siendo coherentes y racionales, sabemos que duele más que tener un dolor físico; el cual no durará para siempre y si tiene cura?, ¿por qué vemos tan normal que una persona llore cuando cae y se lastima alguna parte de su cuerpo, y no lo vemos así cuando esa misma persona pierde un ser querido?, ¿por qué lloramos con facilidad al ver una película, de género drama, en la que nosotros ni siquiera llegamos a ser los actores y en la realidad, donde sí somos los que experimentamos en carne propia ese dolor, sin la necesidad de actuar, lo hacemos para demostrarle a la gente lo que no estamos en realidad sintiendo?, son muchas las preguntas que tengo pero son más las respuestas que escasean puesto que esta tan evitado el tema de la muerte y lo que esta conlleva, que sólo he encontrado algunas respuestas de forma muy parcial, y tampoco me afano por hallarlas porque este no es únicamente un trabajo mío, quiero compartirlo con aquellas personas que lo lean para que comencemos a hacer cultura del duelo, y entre todos aquellos que acepten esta invitación comencemos a darle respuesta a estas preguntas, centrándonos en la realidad y no en la fantasía para evitar que continúen propagándose tantos mitos que nos están alterando el camino.

Sólo es aceptado que la persona exprese su dolor los días recientes a la pérdida, y en el mejor de los casos, los primeros dos meses; pero si después de este tiempo lo sigue manifestando, ya se convierte en un problema, tanto para él que no sabe como resolverlo y para la sociedad que no sabe como quitarlo. Estamos llenos de mitos que nos dificultan el proceso de recuperarnos ante una pérdida y nos atrevemos a medir el dolor de las personas, en cuanto al tiempo que compartimos con ese ser querido que ya no esta, como si el dolor pudiese medirse y compararse. Los primeros meses después de la pérdida, son momentos de aturdimiento donde el sobreviviente apenas esta cayendo en la realidad, pero después, cuando la sociedad empieza a alejarse, los llamados deudos comienzan a concientizarse de la pérdida entre tanto porque el apoyo día a día se va ausentando e irónicamente el dolor aumentando.

"En ninguna otra situación como el duelo, el dolor producido es TOTAL: es un dolor biológico (Duele el cuerpo), psicológico (Duele la personalidad), social (Duele la sociedad y su forma de ser), familiar (Nos duele el dolor de otros) y espiritual (Duele el alma). En la pérdida de un ser querido duele el pasado, el presente y especialmente el futuro. Toda la vida en su conjunto duele" 

¿Por qué es importante llorar?

Cito esta frase porque es la que realmente puede resumir todo lo que un deudo puede sentir y no ha encontrado la forma correcta de expresar en palabras ese dolor tan grande que esta experimentando. Somos seres Biopsicosociales, es decir que estamos atravesados por lo biológico, lo mental y lo social; y es quizás en el duelo, una de las pocas vivencias del ser humano, donde estas tres condiciones se unen y nos hacen sentir tan mal, puesto que la sociedad con sus mitos interrumpen el curso normal del duelo viendo la necesidad de reevaluar las amistades que tenemos; nuestro cuerpo se enferma, debido a que el duelo es considerado como el estrés más alto al que esta sometido el hombre y en una situación de estas, el cuerpo se desgasta para poder obtener la energía necesaria para seguir viviendo y de esta forma nuestras defensas disminuyen estando propicios a enfermar con mayor frecuencia; finalmente esa persona que murió se llevó algo de nosotros que interfiere en nuestra personalidad y nos sentimos locos puesto que no sabemos enfrentarnos a una situación que nunca antes habíamos experimentado y nuestras estrategias de afrontamiento que en épocas pasadas utilizábamos ahora no nos sirven para quitar este dolor.

Somos nosotros quienes estamos sintiendo este dolor y sabemos que es en realidad lo que nos puede servir y que no en el proceso, es por eso que vale recordar que tenemos que establecer límites para poder permitirnos expresar el sufrimiento y así no tener que aparentarle a la sociedad nuestra valentía, mientras que por dentro nos estamos muriendo. Es el dolor más grande que puede sentirse en la existencia y al que más trabas le ponemos para evitar sentirlo o expresarlo. Permitámonos llorar, eso es lo que en realidad necesitamos.

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Escrito por

Carolina Jaramillo Pérez

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Bibliografía

  • MONTOYA, Carrasquilla J (1988).  GUIA PARA EL DUELO, Sobre el cómo ayudarnos y ayudar a otros a recuperarse de la pérdida de un ser querido. Funeraria San Vicente.

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