​Trastorno por estrés postraumático: ¿De qué se trata?

El trastorno por estrés postraumático (TEPT) es un conjunto de respuestas postraumáticas prolongadas que pueden llegar a presentarse en cualquier persona que se vea sometida a un evento traumático en el que haya sufrido, o haya sido amenazada con sufrir daño físico (violencia, fenómenos naturales, accidentes).

Todos estamos expuestos a sufrir de este trastorno cuando algo que vemos, escuchamos o sentimos termina siendo asociado con sentimientos de horror y desesperanza.

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Con este resultado es muy poco probable que puedas clasificar en un diagnóstico de TEPT. Si bien es posible que sufras algunos rasgos leves asociados con el Trastorno, es poco probable que lo tengas.

Cuando los síntomas de TEPT se encuentran en este rango, a veces pueden afectar la vida cotidiana de una persona, haciendo que sus actividades normales, como el trabajo o la escuela, sean más desafiantes que para otras. Mantener el enfoque y la concentración es difícil y por eso, es importante acudir a terapia psicológica.

Es muy probable que sufras Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT). Cuando los síntomas son tan severos, tienden a afectar tu vida cotidiana (trabajo, estudios, familia, ocio) de manera notable. Te cuesta mucho aislarte del hecho que te produjo el trauma y necesitas acudir a un psicólogo para que te diagnostique y te proponga un tratamiento adecuado a tu caso.

Desde 'afuera' es muy difícil entender de qué se trata. Quienes no han vivido una experiencia de este tipo pueden tener dificultades para entender los síntomas que acompañan al TEPT y pueden sentirse frustrados al no saber cómo ayudar a estas personas, sin embargo, lo más importante es aprender a identificar el trastorno y buscar ayuda experta para hacerle frente.

Causas del trastorno por estrés postraumático (TEPT)

Los sucesos extremadamente estresantes de naturaleza traumática dan origen al TEPT. Hablamos, por ejemplo, de  la exposición a la guerra; el abuso infantil, ya sea sexual o físico; un ataque terrorista; violación o abuso físico; accidentes graves, tales como un accidente de tránsito; o desastres naturales, como por ejemplo un incendio, tornado, huracán, inundación o sismo, entre otros.

"Para un niño pequeño, la violencia es una experiencia abrumadora, incontrolable y terrible, y sus efectos emocionales pueden permanecer durando toda la vida. El trauma se interioriza y se apodera de nosotros al no poder empatizar con el prójimo" - Stephen Grosz, Psicólogo, profesor y escritor estadounidense.

Las personas sometidas a este tipo de situaciones límite pueden sentir que su vida, o la de las personas que están a su lado, está en riesgo lo que provoca miedo e, incluso, la sensación de que no se puede controlar lo que está sucediendo a su alrededor. La gran mayoría de las personas ha sufrido algún tipo de evento traumático de este tipo, sin embargo, muchos no presentan los síntomas en los que se revive constantemente lo sucedido.

Manifestaciones

Cada persona es un mundo diferente en el modo en el que interpreta lo que le sucede. Unos pueden evidenciar lo que sienten más claramente que otros, pero esto no indica que no se deba prestar especial atención a todos los casos de trastorno por estrés postraumático.

En realidad las posibilidades de desarrollar el TEPTestán ligadas a diversos elementos, entre los que se cuentan la intensidad o duración del trauma; si resultó herido o la persona perdió a alguien importante en su vida; la proximidad con el evento; la intensidad de su reacción; el grado de control que sintió sobre lo sucedido; el grado de ayuda y apoyo que recibió luego del evento.

Este tipo de trastorno en la que influye las crisis de ansiedad (y que debe ser tratada por un especialista), se desarrolla típicamente tres meses después del evento traumático, aunque se conoce de casos reportados donde el TEPTse desarrolla de manera mucho más tardía, pasados varios meses e incluso años. Si los síntomas se sufren por menos de un mes, puede considerarse como un caso de trastorno de estrés agudo en lugar de TEPT.

Aunque hemos explicado que todos los casos varían, existen cuatro clases de síntomas frecuentes frente al trastorno de estrés postraumático:

1. Revivir el evento: Es conocido también como 'síntomas de reexperimentación, y consiste en que las personas pueden tener malos recuerdos o pesadillas, incluso creer que la situación se puede llegar a repetir en lo que se conoce como 'escena retrospectiva'.

2.Sensación de excitación: Es denominada también 'hiperactivación', donde la persona puede estar continuamente nerviosa o en constante alerta y a la defensiva en situaciones de peligro.

3. Cambios negativos en creencias o sentimientos: El modo en el que la persona piensa de sí misma o sobre los otros se modifica por el trauma y es posible que le cueste expresar sus sentimientos, además de no estar interesado en actividades que antes disfrutaba.

4. Evitar situaciones que le recuerden al evento: Las personas pueden tratar de evitar situaciones o a individuos que pueden llegar a desencadenar sus recuerdos de los eventos traumáticos.

Vea además: Te indicamos cómo superar el Trastorno por Estrés Postraumático

Los niños también pueden ser víctimas del trastorno por estrés postraumático, padeciendo los mismos síntomas de los adultos u otros diferentes, dependiendo de su edad:

• Niños entre cero y 6 años: pueden sentirse angustiados si sus padre no están cerca, sufrir problemas para dormir e incluso problemas en el control de sus esfínteres o a la hora de ir al baño.
• Niños entre 7 y 11 años: pueden llegar a exteriorizar el trauma por medio de juegos, dibujos o cuentos. Pueden llegar a tener problemas en el colegio y es posible que quieran evitar asistir a clases. Muchos llegan a sufrir pesadillas y volverse irritables o agresivos.
• Niños entre 12 y 18 años: Sus síntomas son cada vez más parecidos a los de los adultos, con episodios de ansiedad, depresión, retraimiento, casos de abuso de sustancias e, incluso, pueden llegar a huir de sus hogares.

El trastorno por estrés postraumático ha sido especialmente estudiado entre miembros de las Fuerzas Militares de diferentes países, debido a que los uniformados son expuestos con mayor frecuencia a situaciones traumáticas.

De acuerdo con un artículo publicado por el investigador Álvaro Roberto Vallejo Samudio, PhD en psicología, en la revista Terapia Psicológica en 2011, la cifra puede llegar a ser significativa si se tiene en cuenta que "los niños que viven en municipios donde han sucedido confrontaciones armadas tienen 19 veces más probabilidad de sufrir TEPTbélico que los niños de municipios no expuestos".

Vea admás: Así trabaja el psicólogo ante el estrés postraumático

Debido a las condiciones de nuestro país existen muchos focos posibles a los que estamos expuestos. Es claro que no podemos esperar uniformidad en los síntomas y que también existen otras situaciones que pueden dar origen al trastorno, por lo que es importante acercarnos a un diagnóstico acertado con herramientas como el test que hemos desarrollado para orientarte acerca del tema.

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